#YoTambién he sufrido abusos

#YoTambién.

Sí, yo también, y muchas mujeres también. De hecho me cuestiono si alguna mujer no ha sufrido abusos en su vida.

En la #OficinaFroggiesMadrid somos 5 mujeres, y todas hemos sufrido alguna vez abusos. De hecho, hemos conversado cómo en las discotecas, la calle, los supuestos piropos barriobajeros, las persecuciones, los voyeur y tantas y tantas veces nos han dejado bloqueadas e invadidas

Aún veo peor las veces que no sabemos que hemos sufrido abusos. Las veces que hemos interiorizado que sí, que los hombres nos pueden tocar el cuerpo o el alma, aunque nosotras no queramos.

La primera vez que recuerdo fue en una excursión del colegio. Sólo quería hacerse el gracioso, y subiendo una escalera, me tocó el culo. Sí, sólo fue eso, el culo, pensarán muchos. Son cosas de niños, pensarán otros… Y no, no son cosas de niños, no. Son cosas de adultos que perpetúan la violencia machista que existe entre las mujeres. Son cosas de adultos que no enseñan a sus hijos a respetarse a sí mismos y por lo tanto a los demás. Son cosas de adultos que mantienen viva la llama de “yo soy superior a ti porque soy hombre”.

No conozco mujer que de noche no mire hacia atrás después de un sonido extraño. No conozco mujer que no haya corrido alguna vez volviendo a casa. Yo misma siempre lo hacía. Y por lo tanto, no quiero que mi hija lo viva así. Necesitamos un cambio social, que va más allá de perpetuar y mantener costumbres.

Necesitamos que todas esas mujeres que creen que no hay machismo, se planteen y miren a su alrededor. Miren con ojos sociales, con la lupa de la realidad. Esa que mata, que viola, que abusa y que, todavía peor, oculta, ignora y evita contar.

Porque parecemos unas exageradas cuando contamos cómo nos sentimos. Y no son exageraciones, porque sólo por el hecho de que yo me acuerde de ese momento en esa excursión (y los que me conocéis sabréis que mi memoria está limitada), dice mucho del poso que puede dejar cualquier experiencia en el consciente y en el inconsciente.

YoTambién he sufrido abusos

Y no, no quiero que mis hijos sean víctimas ni verdugos. No me resulta justo tener que advertir a Cloe de que su vida puede ser más hostil que la de Kian. No me resulta justo hablarle de cuidado. Porque no, no debe tener más cuidado que nadie. No por ser mujer. No quiero que por inculcarle el cuidado pueda coartar su libertad, por muy mínimo que sea. No quiero que uno sea más libre en la vida que otro. Quiero que ninguno mire hacia atrás en una noche volviendo a casa. Deseo que ninguno sienta incomodidad en su cuerpo porque nadie les invade. No quiero que sufran por esta lacra social. No. No lo quiero.

Y como no lo quiero y quiero mejorar las cosas, busco cómo poder acompañarles, cómo cambiar y cómo aportar niños a esta sociedad más conscientes, más completos y más seguros. Y por eso pronto tendremos una formación acerca de todo esto en Froggies. Porque es necesario. Porque como sociedad tenemos un problema muy gordo, y es tan gordo que no podemos mirar hacia otro lado. Simplemente no sabemos cómo hacerlo.

Aprender es lo más sano que puede existir, porque tanta ironía en los niños, tanto control, tanto autoritarismo y tan poca capacidad de elección en la infancia, deja seres que han vivido que otra persona toma las decisiones todo el tiempo. Y eso es lo que hacen, porque es lo que han aprendido, con y sin amor.

La libre elección y el respeto deberían ser la máxima de nuestra vida.

Y tú, ¿te cuestionas todos estos temas? ¿Y cómo los abordas?

 

#PorUnMundoMásFroggies