¿Eres de los que llevas a la playa justo lo que necesitas? ¿Ni más, ni menos?
Yo no.
Aunque conforme voy creciendo como madre, voy mejorando y quiero compartir contigo algunos trucos para ir a la playa con niños pequeños.
Siempre he sido muy precavida, y me cuesta dejar de pensar en los “porsiacasos”. Sin embargo, conforme la familia crece, voy modificando recursos.
Lo primero de todo, uno de los trucos para ir a la playa con niños pequeños más básicos, te diría que vayas con el chip de pasar un buen rato, de disfrutar de todo, y de olvidar que ese rato de cargar y desmontar es parte del disfrute que supone el mar, la arena, libertad y niños.
El primer truco que podría daros es el de ir a la playa con el carro de la compra.
Sí, habéis oído bien: el carro de la compra.
Este truco lo aprendimos de mi prima Silvia, que tiene 4 hijos, ¡y se ha convertido en un must!
Facilita la vida, cargas todo, empujas el carro, y ¡listo! Y si además te pasa como al nuestro, que lo puedes subir, justo debajo cabe la nevera rígida, ¡es lo más!
Lleva sólo lo que creas que vayas a necesitar, bien sea para los niños o para ti. Bebidas, comida, juegos, bañadores de recambio, libros y crema solar.
Negocia con tus hijos antes de ir para saber qué quieren llevar. Es importante dejar claro que si necesitan otra cosa, la llevaréis al día siguiente, así quizás evitamos algún malestar innecesario. La importancia de la comunicación previa, como siempre.
Si tienes una necesidad en un momento concreto, preparar comida, ir a la piscina antes de que cierren, tomar algo con alguien, nadar, pasear…, háblalo con ellos antes de ir, así quedan claros vuestros planes.
Es necesario que también ellos expresen sus necesidades antes de salir, si es que tuvieran alguna en concreto (en niños mayores, suele ser más habitual). Reuniones familiares como parte importante de la comunicación.
Plantéate también si hay algo que quieres enseñar a tus hijos: que se fijen al salpicar si hay gente, que no tiren arena en la cara, que se entierren de x o y manera, que juegen con las palas en la orilla o que corran y corran y corran. Es buena idea hablarlo en pareja y así definir qué criterio “educativo” vais a llevar a cabo juntos, así los niños reciben el mismo mensaje.
Y antes de terminar los trucos para ir a la playa con niños pequeños, no puedo dejar de mencionar el juego. Juega con ellos, enséñales el 3 en raya, juega solo, observa a tus hijos jugar, entiérrales, crea castillos, inventa aventuras, diseña colas de sirena, salta las olas, nada, bucea, lanza y cualquier idea que tenga que ver con el juego.
Y Si tienes un niño muy pequeño que no te puede acompañar andando o va muy lento, no te olvides de portear, que es cómodo, bonito y facilita la vída de todos, como puedes leer en este post de De Monitos y Risas.
También te dejamos otro de nuestros post con trucos para viajar en coche.
Por último, el mejor y más válido truco de todos es agradece a la vida por poder ir a la playa. Hay mucha gente que no se lo puede permitir y se moriría de ganas.
¿De verdad las quejas son necesarias? Respira hondo y disfruta, que estás de vacaciones.
¡Feliz verano!
“De verdad las quejas son necesarias? Respira hondo y disfruta, que estás de vacaciones.”
Qué frase, qué frase!
Muchas gracias!
¡Siempre respirar hondo!
Muchas gracias por tu comentario, bonita :’)
Qué bien nos viene este post!!otra idea para llevar los bultos (toallas, nevera y demás) es usar la silleta paraguas, si porteas también.
Cuánta razón tienes con lo de agradecerle a la vida poder disfrutar de estas cosas, y poder disfrutar de nuestros hijos
Muchos besitos y feliz verano
¡Cuánta razón, Idoia! Una silleta paraguas es genial!!!
Disfrutar de nuestros pequeños es algo que no se puede describir con palabras 😉
Un abrazo, preciosa, y muy feliz verano a ti también!!!