7 consejos para disfrutar del Carnaval en familia
Estamos en tiempo de Carnaval; y en Froggies nos encanta celebrarlo disfrutando en todos los eventos especiales que hemos preparado para estos días.
¿Tú también eres de disfrazarte y celebrar el Carnaval con tus peques? ¿Y cómo lo vivís en tu familia?
Qué quiere el adulto y qué quiere el niño
A menudo en esta época se produce un choque de necesidades entre lo que los adultos queremos, y lo que nuestros hijos e hijas quieren en realidad. Por eso, desde Froggies te animamos a pararte un momento y observarles, conectando con ellos… ¿Qué ves?
Niños y niñas encantados con sus disfraces de príncipes, superheroínas, piratas, payasos, indios, vaqueros, LadyBug, Elsa, Harry Potter…. Y también niños y niñas enfadados o llorando, que no se quieren poner el gorro, la peluca o los zapatos. No quieren ni maquillarse ni peinarse para la ocasión. También vemos niños con miedo a algunos disfraces, o huyendo de algunos personajes grotescos de nuestras tradiciones carnavalescas.
Estemos atentos, y no perdamos de vista el sentir y las necesidades de nuestros peques, porque un momento de disfrute y celebración puede acabar convertido en un auténtico drama. Y no merece la pena pudiendo evitarlo, ¿no crees?
Para que esto no acabe ocurriendo, las ranitas de la charca de Froggies te proponemos 7 consejos para que disfrutes del carnaval en familia. Y sobre todo, 7 consejos que harán que estés segura de que tus peques realmente quieren vivir este momento especial porque les apetece.
Marchando nuestros 7 consejos para disfrutar del carnaval:
- Jugar, jugar y jugar. Pensar en el carnaval como un juego en el que permitamos que sean protagonistas. Es una oportunidad de escucha, de disfrute y de conexión. Para ello vemos importante tener en cuenta la etapa vital en la que se encuentran. ¿Cuál es nuestra actitud ante la elección de los disfraces? ¿Cómo llevamos que se manchen? ¿Es cómodo lo que llevamos? ¿Nos molesta si se quieren quitar el disfraz? ¿Ofrecemos herramientas y oportunidades de juego?
- Fantasía. Seas o no “fan” de la fantasía, es época de historias, de compartir y de conversar acerca de muchos temas que quizás en el día a día no sucedan. ¿Te has planteado cómo quieres abordar muchos de esos temas que los disfraces te brindan la oportunidad de compartir?
- Asegurarnos de que son los niños y las niñas eligen el disfraz. Siempre que tengan la opción de elegir o ser parte, todo es más sencillo. Además, en la elección nos conocemos mucho más. Seguro que hay posibilidad de encontrar un momento hermoso compartiendo gustos y deseos.
- ¿Has probado a preparar el disfraz en casa? Las cosas hechas a mano tienen un plus de mimo y cariño. Y eso es un plus a su autoestima. Customizar, crear desde cero o añadirle algún atrezzo son solo algunas de las posibilidades de juego y conexión que podemos encontrar. Hoy en día tenemos multitud de recursos en las redes que podremos utilizar para fabricar ese disfraz casero en familia. ¿Te animas a probarlo y enviarnos una foto del proceso?
- Si en un momento determinado del día, o en plena celebración, vuestro hijo o vuestra hija se asusta o no quiere participar, escucharle es lo más sencillo para todos. En estas fiestas donde a menudo los adultos también disfrutamos, y peor nos viene acompañarles, suele ser cuando más lo necesiten. Suelen ser celebraciones ruidosas y llenas de gente. Intentemos ponernos en su lugar, empaticemos con ellos y dediquémosle el ratito de juego y conexión que necesitan.
- Compartir momentos juntos. Aunque el grupo tire mucho, momentos de conexión, juegos de vínculo, masajes, juegos cooperativos o solo una conversación mientras merendamos, pueden ayudarnos a disfrutar todos, conectándonos y recargando esa pila que son los niños y que a menudo desconocemos. ¿No te ha pasado que alguna vez sientes que tus hijos necesitan salir de donde están para cargar las pilas contigo? A veces es solo eso, miradas, abrazos, risas o un bocadillo de amor.
- Una retirada a tiempo es una gran victoria. ;P. Seguro que somos capaces de escucharnos todos y ver hasta dónde podemos estar en un determinado lugar o celebración, sin malestares innecesarios o con bienestares agradecidos. ¿No te ha ocurrido alguna vez que después de una buena sesión de acompañamiento con gritos y llantos has pensado… Ay si me hubiera ido media hora antes, otro gallo cantaría…?
Esperamos que te hayan gustado nuestros consejos y que te permitan vivir un carnaval en paz y armonía con tus peques, siempre y cuando este sea el plan que os apetece a todos. Y si no, ya sabes, siempre quedará el plan B. ¿Qué cuál es? Pues cambio de planes 😉
Te dejamos un post de Rejuega que habla de este tema, Carnaval e infancia, con mucha profundidad.
¡Feliz día y feliz tiempo de Carnaval!